Una joven de 18 años que estaba embarazada murió luego de parir a su hija en un hospital al norte de Salta. Ahora, los padres denunciaron a los médicos que la atendieron por obligarla a parir a la beba, quien ya estaba fallecida dentro del vientre de su madre, en vez de practicarle una cesárea.
Este caso de violencia obstétrica sacudió a todo Salta. La adolescente vivía en una comunidad de los pueblos originarios en Santa Victoria Este, al norte de la provincia.
«Ayer se sintió mal y la llevaron al hospital Juan Domingo Perón. Estaba en parto y ellos decían que iba a nacer así normal, pero el bebé ya estaba muerto», expresó un familiar, quien dio a entender que la joven había tenido un aborto espontáneo y por eso la criatura nació ya sin signos vitales.
Además, destacó que la joven no quería parir y que un tal “doctor Parra” la obligó a hacerlo, pese a que la chica manifestó que su bebé ya había fallecido cuando la trasladaron de la comunidad aborigen al hospital zonal.
En consecuencia, los familiares de la víctima denunciaron a los médicos, quienes aparentemente no atendieron correctamente a la joven que falleció en la sala de parto.
Fuente: Crónica