Como cierre del curso de Auxiliar en Panadería y Pastelería, organizado por la Dirección de Juventud Municipal, un grupo de 27 jóvenes agasajaron a los abuelos del Hogar Pablo VI con una deliciosa «Merienda Solidaria».
La iniciativa, que forma parte del trabajo final del curso, incluyó la elaboración de platos dulces y salados por parte de los estudiantes, quienes pusieron en práctica las habilidades adquiridas durante los seis meses de capacitación.
«Es muy importante formar a los jóvenes no solo en sus capacidades laborales, sino también en ser ciudadanos comprometidos con la comunidad», destacó la Secretaria de Género, Renata Hiller, quien acompañó a los estudiantes en la merienda. «Es por eso que desde la Secretaría apoyamos este tipo de iniciativas que acercan a las nuevas generaciones a los adultos mayores».
Un taller con doble certificación
La docente a cargo del curso, Fernanda Santos, explicó que el taller tiene una duración de 6 meses y consta de 24 clases, divididas en 12 de pastelería y 12 de panadería. Al finalizar, los estudiantes reciben una certificación avalada por el Municipio de Auxiliar en Pastelería y Panadería, junto con un carnet sanitario que les permite generar su propio emprendimiento.
«Para nosotros es muy importante que la sociedad siga pensando en nuestros adultos mayores», expresó la directora del Hogar Pablo VI, María Ester Maliqueo. «Que los jóvenes los valoren y les dediquen su tiempo nos llena de esperanza».
