En su exposición en «Del Sur Debate», organizado por Radio del Sur 97.1, el especialista en producción de hidrocarburos Mariano Ciapparelli analizó los desafíos operativos de la Cuenca del Golfo San Jorge y advirtió que la competitividad actual quedó en evidencia frente al crecimiento de Vaca Muerta.
Durante su intervención, Ciapparelli repasó la evolución histórica del lifting cost —el costo operativo para producir un barril de crudo— y señaló que el incremento en los últimos 25 años refleja un sistema que perdió eficiencia.
«En 1998 el lifting cost rondaba casi los 4 dólares por barril. Hoy estamos en 36 dólares. Gran parte tiene que ver con que movemos mucho más fluido y necesitamos más energía, más recursos y más infraestructura para obtener el mismo volumen», explicó.
El especialista comparó la incidencia de las regalías en distintos momentos de la industria y apuntó a la necesidad de revisar la explotación, especialmente ante el aumento en la producción de agua en los yacimientos.
«Si queremos un sistema de explotación que no mueva tantos metros cúbicos para sacar un barril, tenemos que controlar la producción de agua. Hay tecnología para hacerlo, pero las empresas tienen que asumir el riesgo», afirmó.
La comparación con Vaca Muerta: eficiencia vs. estructura agotada
Ciapparelli sostuvo que el avance del shale no debe interpretarse como competencia directa, sino como un espejo que muestra las falencias del sistema tradicional de la Cuenca.
«La existencia de Vaca Muerta desnuda la ineficiencia de mi sistema de explotación. No es que Vaca Muerta nos haya inundado de petróleo y gas: muestra lo que no estamos haciendo bien», planteó.
Recordó que hace poco más de una década Neuquén producía un 60% de lo que generaba la Cuenca del Golfo San Jorge, y que hoy produce cuatro veces más gracias a decisiones de inversión, adopción tecnológica y asunción de riesgo.
«Vaca Muerta se conoce hace 50 años. Lo que cambió fue la tecnología y la decisión de un actor de asumir los costos y los riesgos», indicó.
Advertencia sobre la sustentabilidad del modelo actual
El especialista alertó sobre el riesgo de sostener un esquema basado únicamente en el recorte de costos, especialmente a través de la reducción de personal.
«Una receta basada solo en manejar costos, continúa el estado de declinación. Si seguimos despidiendo gente pero la producción sigue cayendo, en dos años no habrá eficiencia que alcance. Y así vamos a terminar en cero», afirmó.
Finalmente, Ciapparelli remarcó la necesidad de desafiar todas las dimensiones del negocio —reservas, tecnología, gestión humana y modelos de explotación— para recuperar competitividad.
«La eficiencia real no pasa por despedir gente. La solución positiva depende de abordar cada una de las características del negocio y de animarse a desafiar el sistema productivo», concluyó.





