Un veredicto contundente y unánime puso fin a la espera: el jurado popular declaró culpable a Pablo Fernando Moyano por el brutal femicidio de Myrna Maidana, ocurrido el 11 de junio de 2024 en el barrio Área 16. Tras dos intensas jornadas de juicio, los 12 integrantes del jurado no dudaron en calificar el crimen como homicidio triplemente agravado, una figura penal que allana el camino para la prisión perpetua.
La decisión del jurado se basó en la probada concurrencia de tres graves circunstancias que rodearon el crimen:
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Vínculo: Por la relación preexistente entre el agresor y la víctima.
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Violencia de Género (Femicidio): Confirmando que el ataque fue motivado por la condición de mujer de Myrna.
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Criminis Causa: Se determinó que Moyano mató a Myrna para facilitar y ocultar un posterior robo de sus pertenencias.
Este encuadre penal no dejó margen para atenuantes, ni siquiera la confesión del acusado, quien en la primera jornada había admitido su responsabilidad diciendo: “Sé que tengo que pagar las consecuencias. Hice algo que jamás pensé que iba a pasar”.
La brutalidad del crimen y el robo
La reconstrucción del Ministerio Público Fiscal reveló la fría premeditación del femicida:
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Moyano ingresó a la vivienda de Myrna Maidana utilizando una llave.
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Esperó a que la víctima regresara de su trabajo.
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La atacó con extrema violencia, propinándole golpes contundentes en el rostro.
Tras el asesinato, el atacante consumó el robo, sustrayendo electrodomésticos y objetos personales. Luego cargó el botín en el propio auto de Myrna y huyó hacia Trelew, donde finalmente fue interceptado y detenido con los elementos robados en su poder.
El alivio de la familia: «Justicia Indispensable»
El dolor de la familia y allegados se transformó en un momento de alivio frente a la Oficina Judicial. Victoria Funes, hija de Myrna, había sido la voz del reclamo de la comunidad.
«Obtener justicia era indispensable para cerrar un proceso marcado por el dolor y la ausencia», había manifestado Funes.
El veredicto de culpabilidad ratifica el compromiso de la justicia con las víctimas de femicidio y envía un claro mensaje de que la violencia extrema contra las mujeres será castigada con la máxima pena. La sentencia final, que establecerá formalmente la prisión perpetua, se conocerá en los próximos días.
