El ex futbolista David Beckham confesó que tiene un trastorno obsesivo compulsivo (TOC) que es ser fanático del orden y comentó que, cuando su familia está durmiendo, se asegura de que todo esté bajo control ya que, según consideró, «todo tiene que estar perfecto».
«Cuando todos están en la cama yo voy, limpio las velas, enciendo las luces en la configuración correcta, me aseguro de que todo esté ordenado. Odio bajar por la mañana y que haya tazas y platos y tazones», señaló el dueño del Inter Miami de la Major League Soccer en los Estados Unidos en un documental que se verá por la plataforma de streaming Netflix.
Según anticipó el diario británico The Guardian, Beckham además indicó: «Tengo ese trastorno obsesivo compulsivo en el que tengo que tener todo en línea recta o todo tiene que estar en pares. Pondré mis latas de gaseosa en la heladera y si hay una de más la pondré en otro armario en alguna parte. Todo tiene que estar perfecto».